Tractores ilegales: Aurora advirtió sobre derramamiento de sangre

La legalidad abandona la razón y la responsabilidad se opaca. Esto parece pasar con los agricultores y productores de Aurora, quienes llevaron a cabo su protesta contra la Prefectura, en donde manifestaron que no permitirán bajo ninguna circunstancia se les incauten sus tractores.

Los tractores adquiridos de forma ilegal por los productores agrícolas de Aurora, son motivo de disputas, y los enfrentamientos entre la policía y los laborantes parecen estar a un paso.

La falta de papeles que ha generado una marejada

Las cercanías de la frontera Argentina y Brasil han estado en fuerte tensión. En la Colonia Aurora, en la provincia de Misiones, sus trabajadores rurales han protagonizado diversos cruces con miembros de la Prefectura Naval Argentina.

El problema es que los uniformados han intentado incautar los vehículos agrícolas de estos, por no poseer los papeles legales correspondientes. Razón por la cual se produce un conflicto que mezcla tributos, economía y legalidad.

Los agrícolas alegan no tener los papeles que les son exigidos, porque los tractores causantes de la disputa, son usados en Brasil y luego los ingresan por el río Uruguay, a través de canoas, por lo que su precio es más económico.

La ilegalidad es la causa del problema

Los tractores son ilegales, ya que los adquieren porque sus costes son mucho más baratos que en mismo país.
La honestidad le ha jugado en contra a los agrarios, y las autoridades locales están haciendo todo lo posible para evitar que estos circulen. La policía ha venido montando operativos de control sobre la ruta costera 2, para interceptar a los colonos.

En días recientes un operativo permitió incautar un vehículo, lo que desencadenó que los ciudadanos locales en apoyo a este salieran en protesta. La misma terminó en un enfrentamiento verbal y físico con la policía.

Entre los presentes en la protesta se encontraba el intendente, y tal fue el enfrentamiento que se logró no fuera secuestrado el tractor.

Sin embargo el asunto no quedó ahí, pues la policía ofrece más operativos, y los colonos en unión a los pobladores, prometen actuar para no dejarse incautar sus máquinas.

La postura de “cCli”

El jefe comunal de Aurora, Carlos “Cali” Goring, ha dejado clara su postura, y ha sido contundente en ella, mostrándose en total desacuerdo con las incautaciones y los operativos dispuestos para estas, reconociendo la importancia de los vehículos como medio de trabajo.

Goring, se mostró preocupado por cómo los enfrentamientos se puedan radicalizar, y llamó a que la situación se busque solventar de forma pacífica, entre los productores y la prefectura, respetando el derecho al trabajo de los primeros, ya que solo adquieren los vehículos para tareas rurales y no para su comercialización en el territorio nacional.

¿Control intencionado o provocación?

Las opiniones de los trabajos, el resto de los pobladores y del mismo mandatario, hacia la fuerza policial, dependiente del Ministerio de Seguridad Nacional, es que estos conocen plenamente como son adquiridos los vehículos de esta forma y por qué, y hacen los operativos para provocar a los agrarios.

Los controles se están haciendo en la carretera y no en el río, lo que ya no es preventivo pues los vehículos se encuentran en circulación dentro del territorio. Asimismo se dejó conocer que otro tipo de maquinarias también ingresan de la misma forma.

La advertencia

El temor latente es que haya derramamiento de sangre por los enfrentamientos, y que estos terminen además de en destrucciones a la propiedad, en heridos y hasta muertos, ya que se ha radicalizado el conflicto por las posturas a extremistas asumidas por ambas partes. Lo que fueron golpes y pedradas, tal vez terminé más grave con el uso de armas.

Queda seguir de cerca la situación y las reacciones con colonos que reclaman el derecho a trabajar, y policías que argumentan que solo hacen su trabajo, lo cierto es que el panorama no vislumbra que la situación se aplaque por unos días.